Allison Greenfield, la asistente jurídica a quien Donald Trump atacó con falsedades durante su juicio por fraude civil el año pasado, ha sido elegida jueza de la ciudad de Nueva York.

Greenfield, de 38 años, fue una de seis candidatos para los seis asientos en el tribunal civil de Manhattan, que se ocupa de demandas de menor cuantía y otros pleitos menores. Un comité demócrata local respaldó unánimemente su candidatura en febrero, evitando así unas primarias y allanando el camino para que se presentara sin oposición a las elecciones generales del martes.

Como la principal asistente jurídica del juez Arthur Engoron, Greenfield fue un objetivo frecuente de Trump y sus abogados durante el juicio por fraude civil del expresidente.

Trump hizo una publicación despectiva en redes sociales sobre Greenfield en el segundo día del juicio, lo que llevó a Engoron a imponer una orden mordaza limitada que prohibía a los participantes en el caso difamar al personal del tribunal.

Engoron multó a Trump con 15.000 dólares por violar dos veces la orden y posteriormente la amplió para incluir a los abogados de Trump después de que se quejaran en el tribunal de que Greenfield pasaba notas a Engoron.

Acusaron a Engoron de permitir que Greenfield actuara como “una co-jueza de facto” y cuestionaron si sus inclinaciones políticas estaban influyendo en lo que percibían como un sesgo contra Trump “demostrable”.

El abogado de Trump, Christopher Kise, dijo que se sentía como si estuviera “luchando contra dos rivales”. Engoron respondió que tenía “un derecho absolutamente ilimitado” al asesoramiento de Greenfield.

Más tarde, los abogados de Trump solicitaron un juicio nulo, que Engoron rechazó, después de que el sitio de noticias conservador Breitbart News destacara una denuncia ciudadana que acusaba a Greenfield de violar las normas del tribunal al hacer donaciones monetarias a causas demócratas. Muchas de esas contribuciones se hicieron durante la candidatura anterior y sin éxito de Greenfield para un asiento en el tribunal en 2022.

La elección para el tribunal civil puede ser un camino para que los jueces eventualmente se unan al tribunal principal de juicio de Nueva York, conocido como la Corte Suprema del estado. Engoron se unió al tribunal como juez de un tribunal civil y fue nombrado para el tribunal de juicio una década después.

Greenfield estudió economía y política en la Universidad de Nueva York y recibió su título en derecho de la Escuela de Derecho Cardozo de Manhattan en 2010. Comenzó a trabajar para Engoron en 2019. Antes de eso, fue abogada para la ciudad.

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