La Cocina Migrante es una compañía de servicios de banquetes, formada mayormente por inmigrantes, que ha cambiado de giro durante la crisis sanitaria que se vive en la ciudad.
Ahora se está dedicando a preparar unas 1,500 comidas diarias para distribuir entre neoyorquinos de escasos recursos en albergues y empleados de hospitales como: Mt. Sinai, Lenox Hill, Memorial Sloan Kettering, Bellevue y Elmhurst.
Dentro de sus planes inmediatos está que, para la próxima semana, The Migrant Kitchen llegue a preparar unos 2,000 platos por día y, posteriormente abocar sus esfuezos para alcanzar los 5,000 platos diarios. Este logro se conseguirá gracias a las donaciones de la comunidad y a la alianza con la World Central Kitchen del chef José Andrés.
En The Migrant Kitchen casi todos sus cocineros son inmigrantes y vienen de países como México, El Salvador, Siria, Palestina y Uganda. Muchos de ellos viven en vecindarios fuertemente afectados por el brote de coronavirus: Elmhurst, Jackson Heights, el sur del Bronx y Brooklyn, por lo que su labor también la dedican a sus familias, compañeros de cuarto y miembros de la comunidad.
El esfuerzo, en general, es coordinado por el chef Nasser Jaber, quien es un refugiado palestino; por el chef mexico-estaodunidense, Daniel Dorado; y por el chef Ryan Graham.
Los platillos en The Migrant Kitchen son creados a partir de la cultura de cada uno de los chefs y cocineros, lo que permite una interesante fusión de sabores.
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